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Blog: "Viviendo el sueño: un intercambio in the American Way", en Estados Unidos

¡Hola! Soy Daniela Núñez Arévalo, voy en quinto año de Contador Público y Auditor, y este año pude lograr uno de mis mas grandes sueños: ¡Irme de intercambio a Estados Unidos! Si les hablaron de lo maravillosa que es esta experiencia, se los vengo a confirmar con creces. Te pueden hablar un montón de lo increíble y emocionante que es, pero vivirlo no se compara a nada. Es una aventura que hay que vivirla.
 
Esta historia se remonta cuando apenas tenía 10 años, en una época donde declaraba metas extravagantes y sueños imposibles, pero dentro de ello, declaré que me iría de intercambio para vivir una aventura. Con el paso de los años, el sueño se mantenía pero los motivos cambiaban, de querer vivir una aventura de chica fanfic pasé a querer tener experiencias que enriquecieran los aspectos sociales, profesionales y personales de mi vida. Y así fue.
 
Querer es poder, sin embargo, es entendible que la vida no te entregue las facilidades para querer ser lo que deseas ser. Lo que muchos no saben, son los esfuerzos que hay detrás de un proceso como este, los miedos, las inseguridades que aparecen en el camino, y la idea de salir de tu zona de confort a un lugar totalmente desconocido. Pero el resultado no da espacio para arrepentimientos, porque es una experiencia incomparable que nadie y nada te la quita.
 
El año 2021, en plena pandemia, se abrió el proceso para la Beca Movilidad Internacional de Pregrado Santander*, una beca la cual solo logran adjudicarla 20 personas (ese año) de la universidad, dentro de la cual te exigen varias cosas, es una beca muy demandada. Cuando postulé me dije a mi misma “¿Qué es lo peor que podría pasar?” Me respondí: “que me digan que no”. Ese no fue el caso, porque dos días antes de mi cumpleaños me dijeron que fui seleccionada, tuve el honor de adjudicar la Beca Santander y de asegurar mi lugar para estudiar en la Southern Connecticut State University en Spring/2023. Tuve que esperar un año y medio para irme, fue un periodo largo, estresante e intenso, aunque admito que fue un movimiento estratégico de mi parte, ya que si hay algo importante que muy pocos hablan, es el tener el dinero para realizar el intercambio. Por otra parte, la segunda beca que obtuve fue de la Fundación Te Apoyamos** de Andrónico Luksic, de quienes estoy y estaré eternamente agradecida, ya me que me dieron los pasajes de avión. 
 
Estados Unidos es un país conocido por un montón de cosas, pero dentro de las principales razones por las cuales lo escogí, es por ser la cúspide del mundo financiero, la calidad de vida y su gran multiculturalidad. Sabía que un país como este está muy bien mirado en mi área profesional, y decidí tomar la oportunidad. Es un país que mira muy bien ser contador auditor, y te ofrece oportunidades para enriquecer tus expectativas profesionales. 
 
Fui a estudiar a la Southern Connecticut State University, mejor conocida como SCSU o simplemente Southern, ubicada en la ciudad de New Haven, Connecticut. En ella, estudié el Major in Accounting y tomé 4 ramos: Costos; Auditoria; Estudios Avanzados en Impuestos; y Contabilidad No Gubernamental y Sin fines de Lucro. Con esto mismo, puedo confirmar la calidad de enseñanza que nos otorgan en mi carrera, ya que es exactamente (costos y auditoria) lo que vi durante mis 4 años en la USACH. Incluso admito que se me hizo más fácil ya que lo había visto antes. Respecto a los otros dos ramos (conta guber e impuestos), fueron un desafío ya que era algo completamente nuevo para mí, aunque tampoco me detuvo, de hecho, conta era una clase de MBA.
 
Mi horario de clases era bastante cómodo pues eran de lunes a miércoles, entre 3 y 8 de la tarde, las cuales tenían un sistema hibrido. Algo de lo que me di cuenta, es que existe mucho estudio autónomo y los profesores esperaban eso de ti, al principio me costó tomarle el ritmo, ya que nunca había pasado por la situación de tener que leer 4 capítulos distintos para 4 clases distintas, tener que hacer resúmenes de cada clase (los ppt eran cada uno de 80 páginas), los trabajos semanales y hacer las tareas de cada clase, todo esto en un periodo de 6 días, aparte de estudiar para las semanas de prueba. Sin embargo, una vez que le tomé el ritmo, las oportunidades de viajar se abrieron inmediatamente. El semestre que yo fui era, para ellos, el segundo semestre, por lo que mucha gente de mis clases estaba por graduarse. Fui durante el invierno, y sucedió en varias ocasiones que los días de lluvia eran eternos y la nieve excesiva no tenía fin.
 
Debo admitir que mi choque cultural fue bastante extremo, ya que estuve viviendo en los dormitorios universitarios, los cuales se encontraban a una caminata de 5 minutos entre los dormitorios y la universidad. Era un departamento compartido para 4 personas, en mi caso, para 3 personas: una chica nativa, una chica inglesa y yo.
 
Sinceramente, extrañé mucho a mi familia, quienes fueron parte de esta travesía y de quienes estoy muy agradecida. Fueron un pilar y apoyo trascendental en esta experiencia. Siempre he sido independiente en lo que respecta a mí como persona, por lo que vivir sola no se me hizo tan difícil, ya que sabía qué necesitaba y qué tenía que hacer. Al principio dependía de Walmart, hasta que logre familiarizarme con la zona y poder ir a comprar al supermercado, eso sí, dependía de Uber para todo lo que hacía ya que en ciudades como New Haven, la mayoría de las personas tienen auto, por lo que el transporte publico no era el mejor de todos. 
 
Lo que me gustaba de la universidad, era las cosas que te ofrecía: el centro de estudiantes (student council) realizaba viajes de todo tipo; el gimnasio que estaba abierto todos los días; la biblioteca y los sistemas de apoyo educativo que tenían para los estudiantes; las organizaciones estudiantiles que había, las cuales variaban según tu gusto; las actividades antes de las semanas de prueba y, sobre todo, la variedad culinaria.
 
Lunes a jueves me dedicaba a cocinar, y los viernes iba al comedor o ConnHall, que con la credencial podía acceder al menú buffet que poseía la universidad, o a veces, me dirigía al Student Center, donde se encontraba el patio de comidas, que tenía opciones similares a Subway, Kentucky FC y Tommy Beans. Amaba comer los rice bowls. 
 
New Haven es una ciudad hermosa, segura y tranquila. La gente es muy amable y no tiene problemas en ayudarte o guiarte. Es una ciudad que funciona de 9 am a 9 pm. En ella existen varias universidades, por ejemplo: Yale University, que es una de la Ivy League. Por otra parte, tuve la oportunidad de conocer un montón de gente de otros países, como Ecuador, Perú, México, Ucrania, Corea de Sur, Inglaterra y China. Además de la oportunidad de viajar dentro del país e ir a otros estados, como Massachusetts, New York y New Jersey; pero dentro de mis destinos favoritos era ir a New York City, la cual quedaba a dos horas en tren. Sobre todo ir a la tienda de Harry Potter en NYC y a Carlo’s Bakery en NJ, sueño de señora cumplido, ¡check!
 
En un país como Estados Unidos, es muy importante tener un buen manejo del inglés, pues si bien dentro de mis viajes tuve oportunidad de utilizar mi español, la multiculturalidad es enorme en este país y debes ser considerado al momento de comunicarte con el resto que no maneja tu lengua nativa, incluso, hay veces en donde solo hablan ingles y debes comunicarte con el resto como puedas. Otra cosa que debes saber: ¡las fechas! Más de alguna vez me equivoque y colocaba dd/mm/aa. Sinceramente, es una experiencia muy interesante cuando te expones a una cultura y sus costumbres que es, de cierta forma, muy distinta a la tuya.
 
Hay muchas cosas de las cuales me gustaría hablar, pero mis palabras y vivencias son la única manera de compartirles lo agradecida que estoy de haber vivido esta experiencia. Agradezco a mis papas y hermanos, que gracias a ellos pude realizar esta experiencia, a mis amigas Catalina y Javiera que fueron un apoyo tremendo. Experiencias como estas definen muchas cosas, temas como la paciencia, perseverancia, la planificación, pero sobre todo, te permiten conocerte, crecer, ampliar y explorar tus horizontes. 
 
Por eso mismo los invito a motivarse, no te quedes con la idea de que tu zona de confort es suficiente, porque no es así. ¡Anímense! ¡Motívense! El intercambio es algo incomparable, y no hay nada mejor que hacerlo estando en los mejores años de tu vida, cuando eres joven y tienes tiempo. No pierdes nada intentándolo, puedes convertirte en el personaje principal de tu propia historia, y no, no es un meme. ¡Atrévete a ser un ciudadano global!
 
 
 
Notas de Usach Internacional
 
*Beca Movilidad Santander: Programa de Santander que es gestionado por Usach Internacional y permite realizar movilidad por asignaturas.
**Beca Fundación Te Apoyamos: Apoyo entregado por dicha institución, autogestionado por la alumna, no gestionado por Usach Internacional.